El Príncipe como excusa para conocer Ceuta

La serie de El Príncipe nos habla de la vida en el barrio del Príncipe Alfonso, un lugar peligroso y conflictivo en el que el yihadismo y el contrabando de drogas forman casi parte de su propia identidad. Pero lo cierto es que este barrio es un mundo aparte, ya que Ceuta es una ciudad tranquila, repleta de atractivos turísticos en el que la pluralidad de religiones y costumbres hacen de este enclave un auténtico crisol de culturas en el que se mezclan católicos con musulmanes, judíos e hindúes de forma pacífica y aleatoria, pues las barriadas no se diferencian por pueblos, si no que en todos ellos se integran sus gentes con total naturalidad.

Aunque pequeña, la Ciudad Autónoma de Ceuta cuenta con un buen número de lugares que vale la pena visitar. Su localización geográfica resulta fundamental desde el punto de vista estratégico, por lo que no es de extrañar que se levantasen tal cantidad de murallas y fortificaciones para protegerla de los asedios y asaltos. Su efectividad fue tal que la ciudad jamás fue tomada. Las murallas reales son unas de las atracciones turísticas principales y el foso navegable representa una atractiva forma de cruzar desde el lado atlántico al mediterráneo para luego bordear la costa alrededor del monte Hacho.

En la zona más estrecha entre estos dos gigantes azules podemos acercarnos hasta la playa de la Ribera, la más concurrida y céntrica de la ciudad y que cuenta con bandera azul. Desde allí se tiene una atractiva postal de la bahía y de Castillejos, en Marruecos.

Más allá, en el monte Hacho, encontramos la Fortaleza del Hacho, una edificación que se convirtió en prisión en 1870 y que actualmente es un lugar ideal desde el que observar la ciudad debido a su gran altura.

Por el centro de la ciudad podremos echar un ojo a la Casa de los Dragones, un edificio de estilo ecléctico completado en 1905 y que se distingue por las esculturas de estos lagartos voladores que hay en la parte superior. Desgraciadamente, los dragones originales desaparecieron y los hoy ocupan su lugar son réplicas modernas realizadas en resina y fibra de vidrio. Por la noche, su atractivo de multiplica debido a la iluminación que acompaña la escena.

Otra zona curiosa es el Parque Marítimo del Mediterráneo, un gigantesco parque diseñado por el artista canario César Manrique en una zona ganada al mar y cuyos lagos de agua de mar son de una belleza espectacular. También cuenta con solariums, un puerto deportivo, y todo tipo de instalaciones y servicios ideales para pasar una jornada de relax.

Muy cerca del puerto tenemos la Plaza de África, el centro neurálgico de la ciudad y en la que podemos encontrar la catedral de la Asunción de Ceuta, de fachada neoclásica, y el santuario de Santa María de África, que contiene la imagen de la Virgen de África.

Si lo que queremos es tener una panorámica de Ceuta desde lo alto el lugar ideal para ello es el Mirador de Isabel II desde el que se tienen fantásticas vistas de la ciudad autónoma.